LA POESIA Y LA PINTURA, 1626. Francesco Furini. Galería Palatina, Florencia. "La armonía es más fuerte que la luz"

Descripción de cuadros para Guillermo

LA MADRE (de Giosuè Carducci)


 Ante el grupo escultórico de Adriano Cecioni



La madre, 1886
Galleria Nazionale d'Arte Moderna
Roma
Adriano Cecioni
 Sin duda el alba, que a nuestros rústicos
hacia los campos acucia, aún gríseos,
ella avanzar veía, andando
descalza entre olor de heno escarchado.

Sobre los surcos doblada, oíanla
cantar, de polvo blancos, de álamos,
desafiando con su coplas
a las cigarras de los alcores.

Cuando del tajo su pecho túrgido,
leonados bucles, faz bruna mórbida,
alzaba, ¡oh, Toscana!, tus tardes
aureolaban sus formas gallardas.

Ahora, robusta madre, a su párvulo
robusto, ahíto del pecho lácteo,
brusca alza en alto y con dulzura
le habla, sus ojos vuelve el pequeño

a la materna mirada fúlgida,
y el cuerpecito, de inquietud trémulo,
y sus dedos la buscan; ríe
la madre, todo amor desbordante.

Ríe con ella la obra doméstica
de sus manos; las cebadas dóblanse
risueñas en el cerro verde;
muge el buey y en la era canta el gallo.

Estas, ¡oh Adriano!, visiones célicas
son el consuelo otorgado al ánimo
del fuerte, que desprecia sombras
de gloria que las plebes adoran.

Por eso en mármol, severo artífice,
tú una esperanza secular e ínclita
plasmas. ¿Cuándo será el trabajo
placer? El amor, ¿cuándo un descanso?

¿Cuándo una plebe, libre y enérgica,
al sol mirando, dirá: "No a bélicas
luchas, no al ocio, no al tirano
des luz, sino al reino del trabajo"?