L'Estaque Paul Cezanne |
En primer plano, vemos Tiempo y Vida
precipitados en su carrera
hacia la izquierda del cuadro,
donde la orilla se encuentra con la orilla.
Pero ese lugar de encuentro
no está pintado;
no figura en el lienzo. Porque el otro lado de la bahía
es el cielo y la eternidad,
con una lívida bruma blanca sobre sus montañas.
Y el agua inmensa de L'Estaque es un intermediario
para los diminutos botes de remos.