La iglesia del mercado de Halle, 1929 Lyonel Feininger Nuea York, Museo de Arte Moderno |
si hasta su estructura entera vibra
con los magníficat de dentro?
Muchos edificios se han construido
sobre la tierra, y aún más altos; pero mira,
nada tan cerca de los cielos como las catedrales,
pues no se sabe si sólo son del hombre
o también divinas, y al vez del infierno,
porque acaban siendo torres de Babel.
Poco somos frente a ellas, nada más
que algún brochazo: unas mínimas pinceladas
para el cuerpo, otra rápida para la sombra.
¿No ves, acaso, en esos trazos, al que, temeroso
de su muerte, mira la fachada?
¿O a esa viuda diciendo a su retoño que tañen
las campanas alados ángeles de mármol?
Así que, ¿cómo no va a conmoverse tu corazón
por esta gente, tu corazón sagrado, que vibra
con su música de dentro?, ¿cómo no va a enternecerse
su estructura entera, si hasta las piedras de esas torres
se disuelven en esos cubos azulados?