esperando.
Proa junto a proa junto a proa. Amarrados desde hace años.
CAPERION, Monrovia.
KRITOS, Andros.
SCOTIA, Panamá.
Cuadros oscuros en el agua, alguien los descolgó.
Como juguetes de nuestra infancia que se han hecho gigantes
y nos acusan
por lo que nunca fuimos.
XELATROS, Pireus.
CASSIOPEJA, Monravia.
El mar ha terminado de leerlos.
Pero la primera vez que vinimos a Syros –era de noche–
vimos proa junto a proa a la luz de la luna y pensamos:
¡Qué flota poderosa, magníficos transportes!
(del poemario "El cielo a medio hacer" Ed: Nórdica)