Robledal, 1887. Ivan Shishkin |
(para mi hijo Guillermo)
Querido Hijo; el mundo es un bazar
lleno de cosas de precioso aspecto.
No pienses, sin embargo, que es perfecto.
Antes, quizás; ahora hay un lugar
en el que queda un hueco por llenar.
No está, se lo llevaron, en efecto:
un bosque que no tiene ni un defecto,
un robledal en el país del zar;
su verde prado sin ningún intruso,
con sombras en los troncos y un sendero;
los árboles, la hierba, el cielo incluso,
la luz del sol y un viento muy ligero.
¡Qué prodigio; robar un bosque entero,
meterlo en un museo de arte ruso!